Revisando distintos temas
implicados en la operación de rescate de la banca española, hasta ahora hemos
visto las características de la operación y la inadecuada estructura de la
Unión Europea para anticiparse a las circunstancias, lo que provoca que vaya a
remolque de las mismas.
Hoy, vamos a revisar los datos
aparecidos sobre el sistema financiero y que han llevado al diseño de la
operación citada.
La curiosa espoleta que ha
disparado la desconfianza en el sistema financiero español y, en última
instancia, en toda nuestra economía ha sido el modo en que se ha hecho la
nacionalización de BFA-Bankia.
Lo primero que habría que
explicar es por qué llamo “curiosa” a la espoleta que ha dado lugar a los
últimos acontecimientos. Resulta sorprendente la perplejidad que ha producido
ante la intervención de la entidad presidida por Rodrigo Rato, cuando las dos
principales Cajas que integraban el proyecto Bankia (Caja Madrid y Bancaja)
llevaban varios ejercicios mostrando resultados preocupantes. Aunque la
situación de Bancaja había sido aireada en los medios de comunicación frente a
la visión más positiva que se ofrecía de Caja Madrid, esta última presentaba
unos datos de morosidad y caída de beneficios que hubieran debido poner en
alerta a cualquier analista un poco avezado. Veamos, brevemente, algunos
antecedentes:
1.- 7 de abril de 2009.- Se hace público que la morosidad en
algunas titulizaciones hipotecarias de Caja Madrid alcanzaba el 15%: http://www.cotizalia.com/cache/2009/04/07/noticias_60_morosidad_algunas_titulizaciones_hipotecarias_madrid_alcanza.html.
2.- 21 de abril de 2009.- En esa fecha, a pesar de que los
resultados de Caja Madrid parecían satisfactorios, la morosidad ya alcanzaba el
5,57%: http://www.cotizalia.com/cache/2009/04/21/noticias_29_madrid_millones_hasta_marzo_morosidad_elevo_hasta.html.
3.- 21 de julio de 2009.- Los datos del primer semestre de 2009
muestran las primeras señales de preocupación. Aunque la morosidad se mantiene
en el 5,55%, el beneficio neto atribuido cayó en un 46.9% debido, principalmente,
al aumento de provisiones: http://www.cotizalia.com/cache/2009/07/21/noticias_28_madrid_57566_millones_hasta_junio_menos_morosidad.html.
4.- Tercer trimestre de 2009.- Caja Madrid realiza en este período
dos operaciones con el fin de poder contabilizar plusvalías. Por un lado,
realizó una operación de “sale & lease back”, es decir, de venta y
posterior alquiler, de 300 sucursales: http://www.cotizalia.com/cache/2009/10/02/noticias_36_caja_madrid_venta_oficinas.html.
Por otra parte, también puso a la venta su 2,9% en Bankinter: http://www.cotizalia.com/cache/2009/10/23/noticias_27_madrid_vendera_bankinter.html.
5.- 19 de enero de 2010.- Se anuncian los resultados de 2009 de la
entidad y los mismos presentan una caída del 68,4% en relación al anterior
ejercicio: http://www.libertaddigital.com/economia/caja-madrid-gana-265-millones-de-euros-en-2009-1276381924/.
Sorprende que, al final del período, la morosidad fuera del 5,4%, es decir, que
la misma apenas hubiera crecido a lo largo de un año de crisis como fue el 2009.
¿Contención o refinanciaciones para evitar afloramientos de operaciones con
dificultades de pago?
6.- 29 de julio de 2010.- En esta fecha, tras la primera “fusión
fría” de Caja Madrid con Caixa Laietana, Caja Insular, Caja Rioja, Caja Ávila y
Caja Segovia, y con Rodrigo Rato ya como presidente, se anuncia que en el
primer semestre de 2010, la entidad ha reducido su beneficio neto en un 66%: http://www.cotizalia.com/noticias/madrid-millones-hasta-junio-menos-destinar-20100729-55855.html.
Como apreciamos, Caja Madrid ya
tenía problemas antes de su posterior fusión con Bancaja. Y esta fusión con una
caja también con problemas ha llevado, finalmente, a su nacionalización. Que
los datos previos que alertaban de este hecho no tuvieran repercusión en los
medios de comunicación ni que, tras la intervención, se hayan remarcado lo
suficiente, no sé si se debe a la ignorancia o al interés por no hablar de determinadas
cosas…
Lo cierto es que, una vez
producida la nacionalización de BFA-Bankia, el nuevo presidente, José Ignacio
Goirogolzarri ha hablado de unas necesidades de recursos públicos de 19.000
millones de euros adicionales a los 4.465 millones procedentes de la
capitalización concedida en su día por el FROB. Todavía está pendiente que,
desde el Gobierno, se confirme o no que esta va a ser la inyección final de
capital ya que se han barajado varias cifras sin que ninguna haya recibido aún
el visto bueno gubernamental.
Esta indefinición junto a la
falta de concreción del método de recapitalización de la entidad financiera
intervenida ha sido uno de los detonantes de la subida de la prima de riesgo
española y la aprobación de la operación de rescate de la banca española. Pero
conocer lo que hay tras el baile de cifras del que estamos siendo testigos nos
servirá para comprender los motivos de preocupación que se han agudizado en
torno a España. Para ello, les recomendaría que, primero, leyeran el siguiente
enlace, donde se recoge un resumen del análisis que el economista Alberto
Recarte, quien, en su día, también fue consejero de Caja Madrid, hace de la cifra presentada por el nuevo
presidente de Bankia: http://www.esradio.fm/2012-05-28/recarte-el-agujero-no-conocido-de-bankia-es-de-7000-millones-no-23000-1276459763/.
Desmenucemos ahora los números y
centrémonos en un par de detalles de importancia:
1.- Como ya hemos dicho en varias
ocasiones, por un lado, pasaría a ser capital el préstamo de 4.465 millones de
euros que el FROB concedió a Banco Financiero y de Ahorros (BFA), la matriz de
Bankia.
2.- Por otro lado, en virtud de los
Reales Decretos-Ley 2/2012 y 18/2012, el grupo BFA-Bankia necesita realizar
provisiones por un total de 9.000 millones de euros. Para completar estas
provisiones, podían tomarse los beneficios de los 2 próximos ejercicios para
llegar al nivel establecido por la nueva normativa. La duda es si la entidad va
a generar los resultados positivos suficientes para alcanzar dicha cifra. En
caso de que las previsiones no apuntaran a favor de este hecho, los citados Reales
Decretos preveían la inyección de recursos públicos para constituir el “colchón
de seguridad” que las mencionadas provisiones iban a constituir. Que el nuevo
presidente de Bankia incluya en la cifra estimada el importe de las
provisiones, parece certificar que los resultados de la entidad en los 2
próximos años no van a ser muy favorables. Subrayemos esta circunstancia,
porque otro dato posterior que analizaremos parece confirmarla.
3.- Hay que añadir que el nuevo
presidente de Bankia también comunicó que había que imputar unas pérdidas
latentes de 1.000 millones de euros por la caída en bolsa del valor de
Iberdrola, de la cual la entidad financiera tenía el 3,7% a 31 de diciembre de
2011 (según las cuentas anuales de dicho ejercicio de BFA).
4.- Otros dos mil millones de
euros corresponden a créditos fiscales que serían eliminados del balance de
BFA, es decir, de la matriz de Bankia. Parémonos en este punto porque esto
tiene más enjundia de la que los medios le han concedido. Un crédito fiscal
surge cuando, por pérdidas de ejercicios anteriores, surge el derecho ante
Hacienda de compensarlas con beneficios futuros en la base imponible del
Impuesto de Sociedades. La condición para que un crédito fiscal pueda aparecer
como activo en el balance es que la compañía espere, razonablemente, que va a
obtener beneficios en el futuro. Si no hay expectativas de obtención de
beneficios, dichos créditos fiscales no podrían figurar, en ningún caso, como
activo del balance (ya que, obviamente, no habría partida con la cual
compensarlos). Es decir, si la nueva dirección de Bankia ha planteado la
desaparición de los créditos fiscales y su consiguiente saneamiento es que
tiene dudas mínimamente fundadas sobre una futura generación de beneficios por
parte de BFA que sirvan para que pérdidas de ejercicios anteriores sean
compensadas (y hay que tener en cuenta que había 18 años por delante para poder
completar la compensación de dichos créditos fiscales). Todo ello sólo sirve
para alimentar las sospechas que aparecían en el punto 2. Y, evidentemente, el
analista que profundice en esta cuestión no sólo se va a preocupar por el caso
concreto de BFA-Bankia, sino que acabará temiendo que sea un ejemplo extensible
a otras entidades.
5.- Finalmente, quedarían 7.000
millones de euros (hasta completar los 23.465 millones de euros), sobre los que
no se habría dado ninguna explicación por parte de la nueva dirección de la
entidad.
A esta confusión en torno a las
cifras del saneamiento final, se suma el hecho de que tanto la entidad matriz (BFA:
http://www.elmundo.es/elmundo/2012/05/28/economia/1338216412.html)
como la entidad filial (Bankia: http://www.elconfidencial.com/economia/2012/05/25/bankia-reconoce-que-no-gano-309-millones-en-2011-perdio-mas-de-3000-98749/)
han pasado a registrar pérdidas después de una primera presentación de
resultados (antes de la intervención) en la que ambas entidades obtenían,
teóricamente, cifras mucho más favorables.
A día de hoy, está pendiente de
determinar la cuantía final del saneamiento a efectuar y el procedimiento que
se va a utilizar… Así están las cosas respecto a este punto.
A partir de la situación derivada
de la intervención de Bankia, el aluvión desordenado de noticias aparecidas
sobre el sistema financiero español no ha hecho más que agravar la
incertidumbre sobre nuestra economía. Por un lado, estaba la noticia de que
Catalunya Caixa, Novacaixa Galicia y Banco de Valencia necesitan una inyección
de recursos públicos de 30.000 millones de euros, aparecida en el diario EL
MUNDO con fecha 28 de mayo de 2012. El día 29 de mayo, aparecieron las primeras
estimaciones sobre la cuantía de los saneamientos a realizar si el criterio
utilizado para Bankia se extendiera a todo el sistema financiero español y la
misma se elevaba a 60.000 millones de euros (http://www.elconfidencial.com/economia/2012/05/29/el-sector-necesitara-otros-60000-millones-en-provisiones-si-aplica-el-estandar-de-bankia-98871/).
El 7 de junio, se filtra (como medida de presión hacia España, según las malas
lenguas) el informe que ha preparado el FMI sobre la situación de la banca y en
él se afirma que nuestro sistema financiero y en él se afirma que se necesitan
40.000 millones de euros para terminar de sanearlo (http://www.elmundo.es/elmundo/2012/06/07/economia/1339072192.html).
El 8 de junio, se hace pública la estimación de Standard & Poor’s y
coincide con la estimación del FMI, es decir, 40.000 millones de euros (http://www.elmundo.es/elmundo/2012/06/08/economia/1339121324.html).
Y así, con una enorme tensión en los mercados y una gran presión hacia nuestro
país, el 9 de junio se aprobó, finalmente la operación de rescate de nuestra
banca.
A pesar de ello, y a pesar de que
el resultado de las elecciones griegas fue favorable para las fuerzas
europeístas partidarias de mantener su país dentro de la moneda única, la prima
de riesgo ha seguido manteniéndose en niveles record. Que toda la confusión y
falta de transparencia de la que hemos estado hablando en las últimas entradas
de nuestro blog ha influido, es evidente. Pero también influyen noticias e
informaciones que van circulando a nivel internacional, que no tienen eco en
España, que desde aquí no se están desmintiendo y que han hecho mella en el
ánimo de analistas e inversores. ¿Qué informaciones son? Pues en Zero Hedge, p. ej., se estima que el
sistema financiero español necesita 44.000 millones de euros: 19.000 millones
de euros para Bankia y 25.000 millones para otras entidades, entre las que se
incluyen La Caixa, Banco Santander, Banco Popular, BBVA, BANESTO y BANKINTER (http://www.zerohedge.com/news/imf-begins-spains-schrodinger-bail-out).
Y Roberto Centeno, en El Confidencial, el pasado 18 de junio, se hizo eco, por
un lado, de un editorial de The New York
Times, en el cual se afirmaba que España necesitará de un segundo rescate
y, por otro lado, de un informe de Barclays en el que elevaba las pérdidas de
todo el sistema financiero español a 210.000 millones, correspondiendo 38.000
millones a Banco Santander y BBVA (http://www.cotizalia.com/opinion/disparate-economico/2012/06/18/la-deuda-es-ya-insostenible-espana-necesita-una-quita-7148/).
¿Por qué no se desmienten todos estos extremos, que explican, en gran medida,
lo que está pasando con nuestra prima de riesgo? Posiblemente, porque se
prefiere no dar pábulo a estas informaciones y se prefiere, en el lado interno,
apostar por la calma de la anestesia colectiva y, en el ámbito internacional,
jugar la carta de que somos “too big to
fail”, es decir, demasiado grandes para caer por los efectos que ello
tendría sobre la economía mundial.
Y así, vamos tirando, con la
economía en caída libre, el desempleo en aumento y la incertidumbre en su
máximo apogeo…
En nuestra próxima entrada, para
terminar esta serie sobre el rescate a la banca española, vamos a analizar si
es conveniente o no salvar a los bancos o si sería mejor dejarlos caer…
* * *
Como nueva prueba que alimenta lo
que llamé, en la anterior entrada, mi “brusescepticismo”, les adjunto esta
noticia. Y es seria, no es ninguna broma:
(*) El título de esta entrada
está inspirado por la obra El largo viaje
del día hacia la noche (1941) del dramaturgo estadounidense Eugene O´Neill
(1888-1953), ganador del Premio Nobel en 1936.
Comentarios
Publicar un comentario